sábado, 11 de diciembre de 2010

La poesía



Si de resultar resueltas las huellas
pregonando padrenuestros por hogares estables,
siendo resuelto el mal que nos invade, justo
sería creer en resurrección de carne podrida
condenándome a los azogues del fatuo resorte;
pero leer lo que a continuación os escribo,
es de mente sucia, lo estimo, pero algo sacaréis
de provecho si os surte el efecto de razonar al respecto:

La noche es oscura mas el día es albo como
la muerte es liberación y la vida esclavitud;
amar es derrochar mientras poseer es mezquino
tanto como procrear es esquivo a palidecer
ante lo oscuro; la fe es ponzoña de débiles
mientras las doctrinas son órdenes para siervos;
el trabajo machaca las dotes y el ocio es necio
arrogante hacia el suicidio del ingenio; la soledad
es bella mas la belleza es efímera como el
pensamiento de un pez; la arrogancia es coraza
y lo débil es de enfermo; el caos es vida
mientras la sociedad es la ruina; lo efímero
es bello mientras la letanía es locura diáfana;
lo diácono es perverso como la rabia es conversa;
las conversaciones son nidos de atenciones mientras
los ignorantes son la masa informante; el
mar es purificante como la tierra es nuestro
reafirmante; pero de todas las cosas, la única verdadera,
pasional, sincera y racional es la poesía.

Antonio Jiménez

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