Me cago en mi puta estampa 2

Llevo tiempo sin hablar de mí a no ser a través de las poesías, y estoy pensando si no sería una buena idea seguir sin hacerlo. Huelga decir que no estoy en unas de mis mejores épocas. Sufro la maldita enfermedad de la depresión (anoto esto para quienes no me conozcan) y llevo diez malditos años debatiéndome entre periodos de más o menos cierta estabilidad con otros en los que me considero como la persona más desgraciada del planeta. Asumo con garantías que no lo soy, eso me lo han repetido hasta la saciedad psicólo@s, psiquiatr@s y personas más o menos con cierta tendencia a la amistad. Sé de sobras que soy afortunado por tener una familia que me respalda, por ser padre de dos hijos que son (y no es amor de padre) la envidia de muchos padres, soy cultivado y tengo salud y memoria, pese a haber estado cuatro lustros castigándome mente, estómago, páncreas e hígado cosa mala. He sobrevivido donde otros han muerto y  a pesar de padecer mal de amores, puedo decir de estar íntegro a pesar de todo. Pero no es nada de eso lo que me influye o me retracta. Intento pensar en positivo pero no puedo. Esa es, a grandes rasgos, la sensación que arrastro. Leo todos los días, escribo, mantengo al día cuatro blogs que, aparte del musical, están circulando por la blogosfera sin pena ni gloria. Y NO ME QUEJO POR LO SIGUIENTE: Un día me dijeron que para tener seguidores había que serlo de otros blogs, comentar tu también, y sinceramente, salvo honrosas excepciones, los blogs que me encuentro por esta red CASI TODOS me parecen una soberana mierda. Para hartarte de escribir y no decir nada, no tener un alma dentro del cuerpo, no transmitir nada, para eso, PIENSA UNA MERCED, se queda uno en la cama vomitando o masturbándose. Este mundo es lo suficientemente estúpido para que vengan más insulsos a estupidarlo más. Y sí, creo en la libertad de expresión y veo bien que la expongan en su blog, pero, POR FAVOR, no me pidan que visite blogs y los comente por mucha causa QUID PRO QUO que sea.

Quitada una molestia de encima, diré una cosilla más. He hecho el capullo cosa mala. Si, lo confieso. Por ahorrarme diez euros en la factura de internet, me cambié de Tele2 a Ya.Com Y NO VEÁIS COMO LA HE CAGADO!!! Para empezar, vuelvo atrás en el tiempo y diré que soy un capullo arrogante que no es capaz de esperar el tiempo para que le llegue las cosas. Me explico: Cuando me compré mi primer ordenador, hace ya la friolera de catorce años, no pude esperar a que llegara el servicio técnico y me lo instalara, que cojones. Fui a la tienda a por él y me lo llevé al piso, y sin tener ni puta idea de informática, desembalé las cosas y me dispuse a meter mano a aquello como si fuera algo cotidiano. En aquellos años no es como ahora que los PC te vienen ya con el sistema operativo instalado. Antes para que te saliera más barato el PC, comprabas unos que se llamaban “clónicos”, que significaba hecho en China pero sin marca. Conseguí de mi primo el Windows 95 pirateado y las instrucciones de cómo instalarlo en aquél artilugio. Desde entonces, todo lo he hecho a base de meteduras de pata y de echarle horas a esto, de ser un obstinado cabezota y, por supuesto, porque me atrae este mundo. Pues bien, me llegó el modem nuevo de los huevos e internet iba más lento que una manada de tortugas. Pasaba el test de velocidad y a duras penas llegaba al mega cuando tengo contratadas diez megas. Antes de llamar al servicio técnico, cuestión que me toca mucho los cojones porque estar diez minutos esperando con la musiquita de los cojones que te ponen mientras esperas a que se quede libre un operario, me pone de los nervios, estuve indagando por Google razones de un por qué a una ralentización del adsl y me encontré con que podía deberse a malware indebido chupando recursos. Descargué el Spyware Terminator y tenía muchos “bichos” dando por culo. Pero la velocidad, igual. Me armé de valor y llamé. La espera, la musiquita y un operario sudamericano que me tomó el pelo tomándome por imbécil pues su solución era que formateara el disco duro. Cuando los gritos llegaron más allá del Missisippi me dijo que fuera a inicio, a ejecutar, que escribiera “cmd” y después el siguiente comando MS2 “netstat –an”. Lo hice y me preguntó cuántos comandos me salían “listening” y cuántos “established”. Los conté y se lo dije. Fuimos y miramos la dirección del router y le entraba la velocidad correcta. Me dijo que borrara los programas de P2P que eran los culpables de todo y buenas tardes señor. Y UNA MIERDA!!! ¿Cuándo forman a estos señores no les enseñan que hay que configurar el router y poner el puto IP porque resulta que Ya.Com funciona con IP fija?... La madre que los parió. Menos mal que está San Google y hay miles de internautas con problemas similares y existen expertos que les ayudan a solucionar sus problemas.

Esta ha sido la cagada número nosecuantos de este año. Un puto año reseteando el jodido modem porque cuando descargo más de la cuenta se vuelve imbécil y pierde los papeles. Me cago en mi puta estampa. Por cierto, la cuestión de que sea tan mal hablado la tiene todas las películas que en mi niñez mis padres me hicieron ver de Joselito.