domingo, 11 de abril de 2010

Continuación 13.0

Hoy me he levantado a las 8:10. He desayunado frugalmente por última vez. Como cada día que pasa ando un poco más, cada vez se me hace más cuesta arriba las dos horas de caminata. Hoy he llegado desfallecido a mi piso, y nada más llegar he tenido que comer atún con biscotes y un plátano, amén de un poco de chocolate al 74% de cacao.
Mañana me libro de andar porque tengo que ir al médico a por medicinas y a la psiquiatra. Vamos a ver que me cuenta esta vez. Una profesional que me ha dicho que me dejaba por imposible pudiendo cambiar de psiquiatra si lo veía conveniente, ya me diréis que clase de profesional es. En fin, de los otros tampoco me han hablado maravillas, y ya se sabe el dicho “más vale malo conocido que bueno por conocer”.

Ayer me vieron mejor en la asociación, incluso participé más y me reí, que eso es raro en mi en los últimos tiempos. Atisbo una brizna de esperanza. Poco a poco todo mi empeño va dando sus frutos. Hoy por ejemplo no he estado para nada en la cama. Como dije ayer, he terminado de leer “Un mundo feliz”, he visto la película "Donde viven los monstruos", y he escrito un relato para el otro blog. El próximo libro que voy a leer es “Alexis o el tratado del inútil combate” de Marguerite Yourcenar. Es un relato epistolar, o sea, que está narrado en forma de carta. Todo el libro es una extensa carta. Es un libro pequeño. Tardaré poco en leerlo, al ritmo que últimamente voy.

Ahora os puedo hablar de “Un mundo mejor”. Aunque se asocia con “1984” de George Orwell, este último me pareció mucho más pesimista en su planteamiento, aparte de que la trama se centraba en tres personajes principalmente. “Un mundo mejor” es más coral, y se puede subdividir en varias tramas, siendo la última la más intensa o importante a mi parecer. Todas se interconectan entre si, pero cada una de ellas podían tener vida propia, podían ser un relato corto. Es mucho más optimista que “1984”, pero también es ácida y crítica. Critica la religión de una manera muy elegante, sin caer en el chabaquismo. Está claro que se asocian las dos obras por lo futuristas que fueron en sus años de concepción. Es una novela que recomiendo encarecidamente. En la biblioteca de cualquier ciudad debe estar. Lo digo por si no la queréis comprar. De hecho, recomiendo las dos.

“Donde viven los monstruos”, película de Spike Jonze (Director de las recomendadísimas Cómo ser John Malkovich y Adaptation, El ladrón de orquídeas)es una película basada en el cuento infantil de Maurice Sendak , quien a su vez lo ilustró. En el se cuenta lo importante que es la imaginación en los más pequeños, tan importante que te puede salvar de ser devorado, así como el trabajo en equipo, la cordialidad, la entrega, en fin, una serie de valores que está muy bien que aprendan los más peques. Mi hija no quiere ver la película porque dice que no quiere ver monstruos. En fin, ella se la pierde.

Hoy me apetece contaros cómo viví el ingreso por primera vez en Salud Mental en Córdoba. La noche antes de la boda de un buen amigo me encontraba en un Pub subterráneo que se llamaba “El Atenea”. Allí me harté de beber Barceló con coca cola y cuando entré en los servicios me vi reflejado en un espejo. Me di tanto asco que empecé a destrozar el servicio, cosa fácil ya que estaba decorado con escayola. Salí del Pub y me persiguió el dueño, dándome alcance y pegándome puñetazos en la cabeza. Yo con la borrachera no reaccioné, y le dejé que se desahogara conmigo. Cuando se cansó, me dejó y me fui al coche a llorar y dormir la mona. Cuando desperté, arranqué el coche y me fui a un bar en la ronda. Me tomé un café con Baileys y ocho copas de anis. Me monté en el coche y conduje hasta que en una curva se me fue y choqué contra dos coches que estaban aparcados. Al momento llegaron dos municipales con la motocicleta. Mi coche quedó destrozado. Costó arreglarlo más de seis mil euros. Yo no llevaba puesto el cinturón de seguridad y con mi cuerpo doblé hacia delante el volante y con la cabeza partí el parabrisas. No sé por qué lo único que me dolía era la rodilla izquierda. Me hicieron la prueba del alcohol y por supuesto, di positivo. Yo no sé por qué, en aquel momento dije que lo hice queriendo, que quería matarme, que la noche anterior me habían pegado una paliza y quería morirme. Me llevaron al cuartelillo de los municipales y el coche se lo llevó la grúa al depósito. Llamaron a mi madre que se personó allí y cuando me querían echar a que fuera al médico de urgencias con ella, a mi se me metió en la cabeza que no, que me tenía que llevar un municipal que había allí que era el típico chulito. Entre los siete municipales que estaban allí intentaron sacarme del cuartelillo a base de empujones y no lo consiguieron. Yo era un amasijo de nervios. Al final el municipal claudicó y me llevó al médico. Me salté toda la cola que había y me hicieron un volante de urgencia para la unidad psiquiátrica del Hospital Reina Sofía de Córdoba. Me llevo un tio mío con mi madre, mi padre y otro tio mío. Cuando llegué allí me observaron e hicieron un volante de ingreso en la planta de Salud Mental del Hospital Provincial de Córdoba. Allí me dejaron ingresado veinte días. Ya os contaré mis aventuras allí otros días.

Si más por hoy se despide este vuestro seguro servidor
AJJ

Música que he escuchado mientras elaboraba la entrada:

Nacho Goberna - Un Bosque de Té Verde (2010)
BMX Bandits - The BMX Love Ep (2009)

No hay comentarios:

Publicar un comentario