Quisiera entender que escondes
pero me lo ocultas como aquello
que se precia de bien preciado.
Por más vueltas que le doy a todo
significado de señales que vas
dejando, voy notando que no
doy más que palos de ciego pues
mi anhelo no comprende de
aquello que tú estableces.
Con un beso quise facilitarte
las cosas, pero no hago más
que pensar si no habré obrado
torpemente habiendo actuado
con prisas y mal, dándote a
entender que no conciba sin
ti una vida, sino que sin ti no
concibo mi vida. Quisiera
mostrarte mi arrepentimiento
pero ya sabes que presumo
de a lo hecho pecho, solo
pedir que te supiera tan
dulce y sereno como a mí.
Hoy me he sorprendido hablando, sin el permiso de mis labios,repasando en mi vocabulario, se me escapo una palabra, que perdi un dia de tanto usarla.
ResponderEliminarEsa palabra es GRACIAS,no la digas ni la pintes, solo escuchala despacio. GRACIAS por hacerme sentir de nuevo,ese beso que me diste fue tierno, calido, y me gusto, me hiciste tocar el cielo con las manos... un beso Antonio
Nunca se pide disculpas por un beso que se ha querido dar a un ser amado y más si ha sido bien recibido. A veces creemos precipitarnos, pero es que hay que ser espontáneo con esas cosas. Los besos, como los helados, tienen mil sabores distintos y los de la pasión, tienen el mejor sabor de todos.
ResponderEliminarSoyyo, con ese beso quise demostrarte de que materiales están hechos mis sentimientos. Me gustó tanto la palabra que me dijiste, que fué un beso robado que yo añadiría más, no solo fué robado, sino que lo capturé y lo tengo a buen recaudo en un rinconcito de mi corazón, llevándolo conmigo a todos los sitios a donde voy. Es lo mínimo que podía llevarme, ya que tu te añuedas día a día de este corazón que cada segundo que pasa late más fuerte por ti.
ResponderEliminarComo tu bien dices, amiga Lisset, este beso me supo a dulzura y a entrega, a cariño e incredulidad, pero sobre todo me supo a inocencia y miel.
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