domingo, 19 de septiembre de 2010

Quizás el amor



Donde siento una dualidad
que va más allá de la sinceridad
por notar que tu verdad
no está más allá del bien y del mal
que no entiendo mi curiosidad
en preguntar por derrotas sin más
conocimiento que tu virtual realidad
que me das a enseñar.

No comprendo la espera que me desespera
ni tu temor por señor que te repesca
día a día sin dar más señera
a tu virtud que la de pedir gresca
por sentir algo más que sentido
a una vida que dejó de tenerlo
cuando miraste esnifar rendido
por la sustancia a tu amor eterno.

Quizás el rincón de mi voluntad
sea que te des cuenta que sin él
tu vida carece de rumbo y calidad,
quieran los sentimientos darme cruel
ritmo de útil utilidad si esa es
su voluntad, pero la mía carece
de total peso si ese es mi cometido fiel
pues te quiero y mi querer crece
a cada minuto que pasa por riel
de minutero gris. Puede parecer
de idiota mi condición, más perecer
de amor me parece un buen final
para alguien a quien la vida vio crecer
por voluntades de querer adivinar
su dulce finiquitar.

Sólo te pido una cosa y es esta,
si me quieres de verdad y no puede
ser lo nuestro, dímelo toda inhiesta
ya que prefiero la sinceridad adrede
que mantener aunque sea breve una pasión
que no durará porque está acabada sin remisión.

Los Olvidados

1 comentario:

  1. Vaya Polonius, bonito, y algo triste te noto hoy, será que es Domingo, y los Domingos son raros. Mañana será otro día, y entre los árboles de esa foto que nos has puesto, quizás salga el sol y se vea algo de verdor. Espero que así sea. Stella.

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