El duelo que por velo instiga mi verbo
no es más doloroso de ver en un instante
de duda existencial que se instala de nuevo
en la dicha constante por sentirte latente.
Mis lágrimas han dejado una estela de franca
violencia por sentirse derramadas como alternativa
a la soledad que transita mi estancia blanca
y desconchada soñándote, mujer de flor altiva.
Decir que te amo es quedarse corto
porque te quiero a manos llenas
y es tan importante para mí estar absorto
pensando en ti a todas horas que mis penas
se las lleva el viento a puertos lejanos
donde nuestro amor por no ser es ufano.
Quiera el cielo que la perspectiva del dolor
no lo sufras ni un solo momento, más la pasión
la has de vivir como si fuera un candor,
y todo te permita saborear mi amor con delirio
de dos enamorados que saben que la vida
ha decidido unirlos para que el temblor
que sus cuerpos sienten al amarse consentido
por el mundo incomprendido donde el color
desgastado sonreirá nuestro amor unido.
Jessica Simpson
No te rindas, aún estás a tiempo de abrazar la vida y comenzar de nuevo, aceptar tu sombra, liberar el peso y retomar el vuelo.
ResponderEliminarNo te rindas, que la vida es eso, continuar el viaje, perseguir los sueños, abrir las esclusas, destrabar el tiempo, correr los escombros y destapar el cielo.
No te rindas, por favor, no cedas.
Aunque el frío queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se ponga y se acalle el viento, aún hay fuego en tu alma, aún hay vida en tu seno.
Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo, porque lo has querido y porque yo te aprecio, porque existe el vino y el amor es cierto, porque no hay herida que no cure el tiempo.
Abrir las puertas, quitar los cerrojos, bajar el puente y cruzar el foso, abandonar las murallas que te protegieron, volver a la vida y aceptar el reto.
Recuperar la risa, ensayar un canto, bajar la guardia y extender las manos, desplegar las alas e intentar de nuevo, celebrar la vida, remontar los cielos.
Mario Benedetti
; )
Preciosa poesía la que me has dedicado. La tendré en cuenta. Un muac.
ResponderEliminarQuiera el destino convocar a los Dioses, esos que como dices tú, nos miran por encima del hombro, para que tengan a bien unir vuestros cuerpos tanto como ya lo están vuestros corazones y pronto puedan disfrutar de los paisajes que conforman ese envase que nos presta la vida para poder amar. Besos, de esos que saben al amor sin sus alas.
ResponderEliminarNos vemos y nos conocemos, mi querida amiga y es verdad que a pesar de no poder consumar más pasión que un paseo por via denostada en el tiempo nuestras conversaciones versan en torno a una unión que podrá ser y quiera la banalidad que así sea. Poede existir más amor pero no concibo de mi ser más que por ella profeso. Son días los que han de pasar y a ellos me aferro. Supongo que tras la espera vendrá la recompensa. Besos con sabor a miel que si no fuera por estar comprometido te desearia con todo mi ser.
ResponderEliminarAférrate a ese maravilloso sueño y mientras, bebe de esas mieles que la vida te ofrece, por ejemplo, de las buenas gentes que por tus letras, se derriten. Ya llegará tu recompensa. Me encanta la miel.
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