miércoles, 22 de junio de 2011

Seis vidas ya las he malgastado, y la última la quiero vivir a tu lado



Hoy he ido andando con todo el calor (eran las 18:30), primero a casa de mis padres a recoger una cosa para mandar por correo ya que iba a correos a por el paquete mensual que me manda la editorial Salvat de la colección TBO que estoy coleccionando. No os miento si os digo que estoy pésimamente mal en lo que a cuestión física se refiere. La casa de mis padres está en lo alto de un promontorio, y cuando llegué allí el corazón estaba en modo batucada. Lo más gracioso es que estoy a régimen y soy muy burro. Solo desayuno, ya no como más en todo el día, que se encarguen los nutrientes cuando tengan ganas de alimento de tomar cuenta de mis lorzillas, faltaría más. Bueno, a lo que iba, que estoy en este plan y mi madre la muy pícara me trae al verme llegar a su casa blanco como la cal un dulce de chocolate, y uno no es de piedra, conclusión, que me lo comí. Vaya régimen me monto. Bueno, que voy a correos y recojo el paquete y franqueo la carta y tiro para mi piso, eso si, tomándome un cortadito a mitad de camino. Cuando voy por la altura del bar el parque, en su ventana, que hay expuestas varias esquelas, vi una que me llamo la atención. Y me llamo la atención porque el finado la palmó solo con 42 años, 2 y pico más que mi edad. Y que queréis que os diga, me ha hecho pensar la esquelita del copón. Y es que estoy malviviendo mi vida, tirándola directamente por el sumidero del cagadero más insulso que exista. Y ya me he dicho basta. Pero éste basta no es como el que he proclamado 1000 veces antes. Este tiene su esencia, su liquidillo proveniente de mis castos huevecillos.

Antonio Jiménez

martes, 7 de junio de 2011

Diagrama en espiral



¿Qué me está pasando?, estoy perdiendo de nuevo el control de mis emociones y no me gusta en absoluto. Me explico. Hace semanas o días (no llevo muy bien el control temporal de este blog) os hablé de mis desengaños a la hora de escoger una web de contactos o el Terra Chat para entablar aproximaciones en pos de encontrar pareja. Pero he conocido a una chica diferente, una chica que me está gustando de verdad y, para colmo, no vive lejos de mi ciudad.

Pero estoy oxidado en cuanto al cortejo se refiere. Sé hablar con ella de temas mundanos y profundizar un poco más allá en su vida privada, pero no sé cómo he de hacerlo para conquistarle el corazón. No sé si será suficiente seguir dialogando e ir intercalando frases románticas (eso no me funcionó con una chica de Málaga) Ir a saco sé que no es su estilo, la voy conociendo. Qué difícil es todo esto…..

Antonio Jiménez

jueves, 2 de junio de 2011

País de judíos hediondos


Que el ser humano con su pirindola o su rayuela es un depredador para su misma especie es algo que por desgracia vamos constatando a lo largo de la historia, pero lo que me ha revuelto las tripas, lo que me ha obstruido el ojete hasta formarse unos callos en mis jodidas hemorroides es que, después de suceder una desgracia natural en tu ciudad y estar la mitad de ella desamparada, cojas y te lucres con ello.

Pues si, en Lorca resulta que las viviendas que no han sufrido daños y son aptas para ser alquiladas lo son por el ridículo precio de 800 €. Y ¿cómo han llegado las cosas a ese extremo de pútrida escoria judía?  Pues resulta que el gobierno ha aprobado unos bonos a fondo perdido de  500 y pico € para ayudar a los alquileres. A eso se le suma un poquillo más, para la gracia de mis chiquillos, que son mu listos y me han de estudiar la universidad. Manda Carajo este país de judíos hediondos.

Antonio Jiménez

Te Deseo


Te deseo primero que ames,
y que amando, también seas amado.
Y que, de no ser así, seas breve en olvidar
y que después de olvidar, no guardes rencores.
Deseo, pues, que no sea así, pero que si es,
sepas ser sin desesperar.
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Te deseo también que tengas amigos,
y que, incluso malos e inconsecuentes
sean valientes y fieles, y que por lo menos
haya uno en quien confiar sin dudar.
.
Y porque la vida es así,
te deseo también que tengas enemigos.
Ni muchos ni pocos, en la medida exacta,
para que, algunas veces, te cuestiones
tus propias certezas. Y que entre ellos,
haya por lo menos uno que sea justo,
para que no te sientas demasiado seguro.
.
Te deseo además que seas útil,
más no insustituible.
Y que en los momentos malos,
cuando no quede más nada,
esa utilidad sea suficiente
para mantenerte en pie.
.
Igualmente, te deseo que seas tolerante,
no con los que se equivocan poco,
porque eso es fácil, sino con los que
se equivocan mucho e irremediablemente
y que haciendo buen uso de esa tolerancia,
sirvas de ejemplo a otros.
.
Te deseo que siendo joven
no madures demasiado de prisa,
y que ya maduro, no insistas en rejuvenecer,
y que siendo viejo no te dediques al desespero.
Porque cada edad tiene su placer y su dolor
y es necesario dejar
que fluyan entre nosotros.
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Te deseo de paso que seas triste.
No todo el año sino apenas un día.
Pero que en ese día descubras
que la risa diaria es buena,
que la risa habitual es sosa y
la risa constante es malsana.
.
Te deseo que descubras,
con urgencia máxima,
por encima y a pesar de todo,
que existen, y que te rodean,
seres oprimidos,
tratados con injusticia y personas infelices.
.
Te deseo que acaricies un perro
alimentes a un pájaro
y oigas a un jilguero erguir triunfante su canto matinal,
porque de esa manera,
sentirás bien por nada.
.
Deseo también que plantes una semilla,
por mas minúscula que sea,
y la acompañes en su crecimiento,
para que descubras de cuántas vidas
está hecho un árbol.
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Te deseo además, que tengas dinero,
porque es necesario ser práctico,
y que por lo menos una vez por año
pongas algo de ese dinero frente a ti y digas
"Esto es mío"
sólo para que quede claro
quien es el dueño de quien.
.
Te deseo también
que ninguno de tus afectos muera,
pero que si muere alguno,
puedas llorar sin lamentarte y sufrir
sin sentirte culpable
.
Te deseo por fin que
sien do hombre, tengas una buena mujer
y que siendo mujer, tengas un buen hombre,
mañana y al día siguiente,
y que cuando estén exhaustos y sonrientes,
hablen sobre amor para recomenzar.
.
Si todas estas cosas llegan a pasar
no tengo más nada que desearte.

Víctor Hugo